Tras un período de silencio-agotamiento-vorágine creativa, me pongo las pilas para ir contando lo que ocurre por esta mi mesa de dibujo. En realidad todo tiene una explicación: pesa ya un quintal, tiene una risa que hipnotiza, y además se llama como yo, Tomás. Mi segundo hijo nació en mayo pasado y desde entonces mi casa se convritió en un manicomio. Ahora uno le va cogiendo el tranquillo al trabajo y la conciliación familiar. Menos mal!After a long silent exhausting crazy period, I am back again, to tell everybody what's happening on my working desk. There really IS a reason: it already weighs a ton, a hypnotizing smile, and my own name, Tomás. My second son was born last May, and since then my house has become a nightmare. Now I'm beginning to catch up with everyhing, to put things in order...thank heaven!!
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